San Martín de los Andes: el paraíso de la montaña
Una aldea de montañas con playas, alojamientos y gastronomía de primer nivel internacional.Es el lugar ideal para gozar de unas vacaciones diferentes: sol, playa y montaña son las tres caras que ofrece esta ciudad neuquina, ubicada en el corazón del Parque Nacional Lanín. Si la idea es ir en plan de aventura, una buena opción podría ser escalar el volcán Lanín con guías especializados. Quizá prefiera experimentar un día de buceo en el Lago Lácar, guiado por expertos en este deporte. Tal vez, contemplar el paisaje leyendo un libro en una playa lejana. O, simplemente, disfrutar de la suave música de un arroyo, de la majestuosidad de los lagos del sur, de los bosques autóctonos y vivir la experiencia de un campamento en plena naturaleza. Si la intención es sumarle un toque de emoción a las vacaciones, una buena alternativa son los deportes de aventura. Entre ellos, sobresale el rafting en el río Hua-Hum (cerca del límite internacional con Chile) o por el río Aluminé, que serpentea el paisaje árido de la Patagonia. Y en las aguas del Lácar, dos disciplinas ya clásicas del verano: windsfurf y esquí acuático.
La pesca con embarcaciones a motor o las flotadas con campamento son la propuesta ideal para los que eligen este deporte que atrae a turistas del mundo entero. San Martín de los Andes se encuentra cerca de los mejores ríos (Caleufu, Alumine Chimehuin y Collon Cura), famosos por la excelente captura. Caminando, navegando, cabalgando o transitando en auto, esta región ofrece paisajes inigualables, plenos de paz y colores vistosos, como Quila Quina y los lagos Lolog, Falkner, Hermoso o Meliquina, que constituyen solo algunos de los espejos lacustres que se pueden visitar para gozar de un día de playa. También hay cabalgatas en el territorio de la comunidad mapuche Curruhuinca, guiadas por baqueanos y salidas en mountain bike a recorrer senderos. Y si de excursiones se trata, las hay para todos los gustos: clásicos como la ruta de los Siete Lagos, el lago Huechulafquen y el Volcán Lanín. Y opciones menos conocidas como El Escorial cerca de las termas de Lahuen Co y otros circuitos cercanos a la ciudad. De igual manera, San Martín de los Andes es el paraíso de la buena mesa. Hay gran cantidad de restaurante de montaña con comidas típicas de la región: degustar truchas, paté de jabalí, goulash de ciervo y acompañarlo con finos vinos de reconocimiento internacional son propuestas tentadoras para cualquier comensal. Por las tardes las típicas casas de té y chocolaterías son una parada tentadora de la zona, con sus tortas vienesas, trufas o alfajores con dulces regionales. Con la caída del sol los wine bars, pubs y el casino se llevan todo el protagonismo nocturno. En cuanto a alojamientos, la ciudad ofrece cabañas, hosterías y hoteles que se destacan por su típica arquitectura andina.
¿Conoces esta ciudad patagónica? ¿Qué estás esperando para visitarla?