Catamarca: Tejidos artesanales argentinos
“Todos los caminos conducen a Roma”, asegura el refrán popular. Pero también llevan a Belén, una pequeña ciudad ubicada a la vera del río de igual nombre en la provincia de Catamarca a la que los turistas acceden provenientes de distintos puntos geográficos del norte argentino: San Fernando del Valle de Catamarca (la capital provincial) a 293 kilómetros, Cafayate (Salta) a 250 km y desde Amaichá del Valle (Tucumán) a tan solo 89 kilómetros.
Al igual que en toda Belén, en este barrio donde abundan las casas de adobe, las artesanías tejidas adquieren un valor muy significativo no solo por su calidad sino también por el diseño. Antonio Avar recibe a los turistas en su casa-boutique de la calle General Roca, donde desarrolló un emprendimiento del que también participan su esposa Fernanda Saracho y sus cinco hijos: “Somos una familia grande como la mayoría en el norte argentino y nos dedicamos al diseño, hilado, teñido, tejido y confección de piezas realizadas en telar criollo. Hacemos arte textil en indumentaria y decoración; étnica tradicional y contemporánea”, resume. Es que en Catamarca, declarada Capital nacional del poncho esta prenda de uso diario es todo un símbolo. El matrimonio atiende a diario a un público curioso por aprender el proceso completo de la producción textil que arranca con el hilado, continúa con el teñido y concluye con el producto terminado. Además se pueden tomar clases abiertas de tejido en telar criollo (que duran entre tres y cinco días con inscripción previa).
Otra forma para conocer el trabajo en telar tradicional y autóctono es visitar el taller “Arañitas Hilanderas”, una cooperativa formada por 25 mujeres artesanas belichas-catamarqueñas que funciona en una casa de familia: “Cuando vienen los turistas, hacemos una pequeña visita guiada donde le explicamos el proceso del manejo de distintos telares e hilados para obtener los trabajos de artesanías. Luego invitamos a pasar al salón donde tenemos las prendas en venta”, explica Nora Arredondo, coordinadora general.
Belén ofrece además la posibilidad de disfrutar de la naturaleza en la Reserva de Biosfera Laguna Blanca, creada para proteger a la fauna autóctona (en especial a las vicuñas) y en la que se pueden ver llamas y flamencos rosados.
¿Cuál es tu modelo artesanal preferido: bicentenario, inca, tehuelche, mapuche o pampa?
